
El investigador del Instituto de Geofísica de laUNAM, Jaime Urrutia Fucugauchi, explicó que esta parte del planeta tiene un radio de mil 220 kilómetros , pero con el paso del tiempo se hace más grande, según demuestran diversos métodos para calcular su tamaño y características.
México.- El núcleo interno de la Tierra , una esfera sólida y viscosa de hierro y níquel que se ubica en la parte más profunda del planeta, crece alrededor de un milímetro cada año, señaló Jaime Urrutia Fucugauchi.
El investigador del Instituto de Geofísica de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) explicó que esta parte del planeta tiene un radio de mil 220 kilómetros , pero con el paso del tiempo se hace más grande, según demuestran diversos métodos para calcular su tamaño y características.
En un comunicado, el ingeniero geofísico y doctor en paleomagnetismo expuso que al núcleo interno lo rodea una zona líquida con un radio de dos mil 100 kilómetros, comparable a un océano pero con hierro en vez de agua.
El núcleo interno fue descubierto en 1936 por la sismóloga danesa Inge Lehmann, cuando trabajaba en la revisión de sismogramas y se percató de que las velocidades de transmisión de las ondas sísmicas que cruzan el interior de la Tierra tenían una pequeña variación.
La sismóloga calculó estas variaciones y así encontró que dentro del núcleo había otro más pequeño, el interno, ambos con características distintas.
Urrutia detalló que la forma de explicarlo es que en el momento que las ondas entran al núcleo externo la velocidad disminuye, porque es una zona de baja velocidad, "pero luego se vuelven a acelerar en la fase sólida".
El núcleo externo tiene una viscosidad muy baja, es líquido y se ha comparado con un océano hecho de hierro; el otro, en contraste, es sólido, abundó el investigador galardonado en 2009 con el Premio Nacional de Ciencias y Artes.
La estructura terrestre continúa con el manto, la capa intermedia y más extensa del globo que constituye 83 por ciento del planeta, de entre dos mil 800 y dos mil 900 kilómetros de grosor, y donde se generan las fuerzas internas, como la deriva de los continentes, la expansión de los océanos y la ocurrencia de terremotos.
La capa más superficial es la corteza, con un grosor que va de 30 a 40 kilómetros en los continentes, y alrededor de 10 kilómetros bajo los océanos. La parte superior está compuesta de rocas del tipo de los granitos, y la inferior de otras más densas, como basaltos o gabros.