Por David Ramírez.
A propósito de la enfermedad de Hugo Chávez, hemos podido leer en la prensa nacional varios artículos dizque de auténticos “revolucionario de izquierda” endiosando la figura del presidente venezolano e ideólogo de la revolución bolivariana.
La inclinación hacia el culto personal de nuestros amigos es irracional, raya en lo ridículo, porque con su veneración y alabanzas llegan a convertir la personalidad histórica del líder venezolano en puro fetiche.
Toda persona que se preste en llamarse de “izquierda” sabe muy bien que el culto a la personalidad es profundamente contrario al pensamiento marxista-leninista. El culto a la personalidad es reaccionario, incompatible con la naturaleza humana porque sabemos que ni siquiera la experiencia del más excepcional dirigente de una revolución puede sustituir la experiencia colectiva de las masas.
He visto con asombro como algunos militantes de la “izquierda” dominicana han convertido la figura de Hugo Chávez casi en un mito cesarista, un lider mesianico, haciendo suyas consignas como “Todos Somos Hugo Chávez”, exaltando también sus presuntas cualidades infalibles, de vanguardia y genio militar de la revolución bolivariana y con atributos similares al prócer Simón Bolívar.
Valorar los aportes revolucionarios de un dirigente es una cosa, endiosarlo es otra. Ya existen amargos precedentes de los graves daños que puede ocasionar a todo proceso revolucionario el culto a la personalidad.
En vida, Vladimir Lenin siempre rechazó cualquier intento de glorificar a su persona, porque para este líder bolchevique el partido era el único "genuino orientador de la revolución". Luego de su muerte y con el ascenso al poder de la camarilla encabezada por Joseph Stalin, el culto a la personalidad socavó los principios democráticos del proyecto revolucionario bolchevique, degeneró en un Estado policial dirigido por un gobierno despótico que perseguía y asesinaba a sus disidentes (como el caso de Leon Trotsky ), en nombre del socialismo.
La consolidación de la dictadura personal de Stalin, trajo consigo el culto a la personalidad más poderoso que haya conocido la humanidad: Durante Stalin la figura de Lenin pasó a ser de extraordinaria veneración, llegando incluso a momificar su cuerpo, una estrategia dirigida a crear un lazo entre el líder fallecido y la figura de un dictador autoritario, megalómano y egocéntrico.
Aquella experiencia fue azarosa y traumática para todos los revolucionarios del mundo, dividió a los partidos comunistas en “socialistas y revisionistas”, la dictadura de Stalin abolió el proyecto bolchevique de Lenin de un autogobierno popular y democrático por otro burocrático y personalista.
Muchos años después,luego de la muerte de Stalin, esa misma camarilla burocrática del PCUSS, que actuaba en nombre de la teoría marxista-leninista, fue barrida por las masas y arrojadas al zafacón de la historia.
El que quiera rendir culto o venerar la personalidad de Hugo Chávez puede hacerlo, es su derecho y su problema.Pero para el verdadero revolucionario de izquierda esto resulta irracional porque el culto a la personalidad anula el protagonismo de las masas, frena su iniciativa y debilita su sentido de responsabilidad por el bien común.
Los que aspira cualquier militante o simpatizante de la izquierda dominicana es una revolución con el liderazgo de las masas y la orientación del partido,sin mitos ni idolatría fanática hacia determinados dirigentes.
lunes, 14 de enero de 2013
New
¿Por qué “endiosar” la figura de Hugo Chávez?
About barahonero.com
Templatesyard is a blogger resources site is a provider of high quality blogger template with premium looking layout and robust design. The main mission of templatesyard is to provide the best quality blogger templates.
internacional
Tags
internacional