Expresamos nuestro m�s profundo dolor por la irreparable p�rdida de una maestra excepcional, ejemplo de dignidad, amor, entrega y vocaci�n de servicio probada a lo largo del tiempo en que hizo del magisterio un verdadero sacerdocio, Do�a Carmen
Llegue nuestra solidaridad para sus familiares todos, en especial a sus hijos, los Dres. Rafael y V�ctor Franco.
Descanse en paz, en la seguridad de que el Alt�simo ha acogido ya su alma en el Santo Cielo.
Doctor Vinicio L�pez