Cuando el manager te manda a la banca sin muchos miramientos, el gerente general justifica al manager, el presidente bromea sobre cambiarte y los dueños no dicen nada, no necesitas más señales: ¡N.O.T.E.Q.U.I.E.R.E.N.!
"Amo a los Yankees. Me encanta esta organización", dijo Rodríguez antes del cuarto partido de la Serie de Campeonato de la Liga Americana contra los Tigres de Detroit en el Comerica Park, que eventualmente fue suspendido por lluvia "Mi objetivo ahora es ayudar al equipo a estar unido y ganar un juego. No permitir que [me afecten] toda esta negatividad, y preguntas, y chismes, esta porquería o aquella porquería, solo concentrarnos en ganar un partido", dijo Rodríguez.
Por negatividad, A-Rod se refiere a que el manager Joe Girardi-- con el apoyo del alto mando, por supuesto-- lo ha rebajado a una carga sin uso en el roster regular desde el cuarto partido de la Serie Divisional contra los Orioles de Baltimore, cuando mandó un emergente por el antesalista en la parte final de un juego cerrado.
Desde ese día, Girardi ha mandado un emergente por A-Rod en las entradas finales en tres ocasiones y en las otras tres, simplemente lo dejó fuera de la alineación titular. La explicación es que Rodríguez (23-3, 12 ponches) está mal, especialmente contra pitchers derechos (18-0, 12 ponches), que son amplia mayoría en la población del staff de lanzadores en Detroit. El gerente general Brian Cashman se ha pasado los últimos dos días caminando entre los periodistas e incluso ofreciendo una conferencia de prensa no solicitada para dejar establecido que Girardi no tomó solo la decisión de sentar al jugador más caro de los Yankees.
Lo irónico del asunto es que uno de los mejores jugadores de la historia del béisbol-- aunque Donald Trump se resista a creerlo-- ha sido sustituido por Eric Chavez, quien tiene de 14-0 con seis ponches en la actual postemporada y batea .195 en su carrera de playoffs. Mientras A-Rod no batea un jonrón desde el 14 de septiembre, Chavez no consigue ningún tipo de hit desde el 30 de septiembre.
"Doy crédito a Joe [Girardi] porque ha sido muy bueno conmigo a través de los años, pero esto es difícil para mí porque soy un jugador competitivo, y siento sinceramente en mi corazón que este equipo es mejor conmigo en la alineación", dijo Rodríguez, quien ha pegado 647 jonrones, ha conquistado tres premios de Jugador Más Valioso y está cerca de arribar a los 3,000 hits y las 2,000 carreras impulsadas.
"Ya sea con mi resumé o no, siempre siento que me merezco la oportunidad porque tengo fe en mis habilidades, empecé a tener mejores swings cuando estuvimos en casa, y cada vez que me presento al plato tengo la oportunidad de marcar la diferencia", agregó.
Por porquería, A-Rod se refiere a recientes reportes de prensa que lo retratan como un antiprofesional que liga mujeres en medio de partidos, mientras sus compañeros batallan en el terreno, y otros que lo ubican en medio de negociaciones para mandarlo al sur de la Florida.
Eso sin contar que Trump, un magnate de bienes raíces con ínfulas de estrella de cine y aires de prospecto para presidente del país, dijo el martes que A-Rod debería ser despedido por bajo redimiento y haber usado sustancias en el pasado y que sin drogas es un pelotero por debajo del promedio.
El miércoles, Keith Olbermann reportó en su blog de MLB.com que Nueva York y los Marlins de Miami habían hablado sobre un cambio por Rodríguez. ESPNNewYork.com encontró que lo que comenzó como una broma durante una conversación entre Randy Levine, presidente de los Yankees, y Jeffrey Loria, el dueño de los Marlins, podría convertirse en algo serio cuando finalice la postemporada.
Cashman negó que como gerente general haya sostenido conversaciones con otro club para cambiar a Rodríguez u otro de sus jugadores.
"No he tenido ningún tipo de discusiones con los Marlins de Florida y ciertamente nunca tendríamos discusiones de cambios bajo las actuales circunstancias", dijo Cashman, quien aparentemente no estaba al tanto de como surgió el asunto.
"Son falsas. No estamos involucrados en conversaciones para cambiar a alguno de nuestros peloteros, incluyendo a Alex. Falso, ciento por ciento falso", agregó el gerente de los Bombarderos del Bronx.
"Hay sangre en el agua", dijo A-Rod usando una expresión equivalente a "haciendo leña del árbol caído" en español, cuando le mencionaron la posibilidad de ser enviado a Miami, donde creció y tiene su residencia invernal.
" Y cuando no estás jugando bien, como yo lo he hecho, y como dije, y tras 9 años con este equipo, algunas de las críticas que he recibido han sido justificadas, y las acepto, pero otras cosas como los chismes... eso no me importa un carajo", agregó. "Y me gustaría que esas cosas no estuvieran sucediendo porque nuestro único enfoque en este momento es ganar un juego de béisbol", agregó.
La realidad es que para los Yankees cambiar a Rodríguez a Miami o cualquier otro lugar tendrán que asumir la mayor parte de los $114 millones de dólares que le adeudan y recibir la autorización del pelotero, que posee cláusula de no cambio en su contrato.
Pero tomando en cuenta la situación, es muy probable que para este momento A-Rod haya comprendido las señales que le han mandando desde todas las capas de poder de los Yankees y no tenga otra opción que colaborar para facilitar su traspaso. Mientras A-Rod dice que ama a los Yankees, es más que evidente que el sentimiento no es reciproco del club al pelotero. "Nosotros nos moveremos hacia adelante, Alex se moverá hacia adelante", dijo Cashman.
"Una cosa que apreciamos de este juego es que sabemos que habrán días buenos y días difíciles. Pero cuando pasamos por momentos duros, no tiene que ser el final de todo. Habrá oportunidades de salir al ring y batallar".
Lo más probable es que el próximo ring en donde A-Rod tenga la oportunidad de batallar no estará en Manhattan, y sí en South Beach o cualquier otro lugar del país.