Amnistía para los moradores de la región Enriquillo. - Barahoneros

lunes, 10 de diciembre de 2012

Amnistía para los moradores de la región Enriquillo.


Por Jose Antonio Matos Peña.- Los productores de la región Enriquillo, sobre todo, los del área de influencias y daños de Río Yaque del Sur, que con sus abundantes y de buenas aguas ha traído a los mismos, vida y muertes en ocasiones, merecen otra suerte y otro trato de parte del poder gubernamental de la nación.

El flagelo de la sigatoka negra en los platanares importado y acrecentado por la alteración en el valle del clima, el contenido de humedad y la falta de apoyo gubernamental real a los productores.

El Yaque del sur con sus riadas, los vertidos irresponsables de la presa de Sabana Yegua, que hoy, precisamente, por los aguaceros que vienen desde la laguna Rincón, siguen su desfogue, al diezmado en términos reales, la capacidad de producción de los agricultores en sentido general y por tanto, a toda la salud y la economía de la zona, cual efecto dominó, derrumbando comercios de todas las índoles, colmados salones, centros de diversiones, almacenes y demás iniciativas de la llamada economía informal, sector éste, de los menos costosos para el estado, porque se autofinanciaban todos los servicios que no le da nuestro mal llamado estado dominicano.

Esos productores, desplazados por una crecida inmerecida del lago Enriquillo, que producto de parte de lo referido anteriormente, ha llegado a poseer en los actuales momentos, un espejo de aguas de por lo menos 430 kilómetros cuadrados, partiendo de los 245 kilómetros cuadrados que tenía al momento de funcionarios del INDRHI, dispusieran dejar de se trasiegue parte de esas aguas excedentes del Yaque, al Mar Caribe, por el Aliviadero de Canoa, han dejado de producir en leche, carnes y víveres el sustento de sus familias y también, el pago al Banco Agrícola, quien les presta, en manera onerosa, abusiva y sin contemplaciones al momento de los vencimientos….y antes.

Este banco, que lo fundó el sátrapa Trujillo, como brazo social de apoyo para sus socios fundamentales, los agricultores, hoy se ha convertido en el cuco de los pobladores que han caído en las dos desgracias, de ser de aquí y producir aquí y de haber visitado sus puertas, hay que vivir aquí para oír el susurro temeroso de sus acreedores que no encuentran con que pagarles los altos intereses y la compulsividad de sus exigencias y visitas, llevando casi a punto de suicidio en algunos casos.

El gobierno central anuncia bajo decreto, la amnistía a los empresarios que tienen deudas pendientes con el fisco, dinero que se ha tomado para empresas y negocios, algunos para bien, como son los usados principalmente en la producción nacional y otros probablemente para importar y hacerle competencia desleal a lo nuestro, anunció recientemente la inyección de mil millones de pesos para referido banco, que solo tendrá la función de empantanar más al productor que quede en la situación de los anteriores, para quedar ahorcados, por decir en buen dominicano.

Amnistía merecen de manera urgen todos estos productores, cuando menos en los intereses, que son muy voluminosos, productores y de la zona del famoso plátano Barahonero, cuyo origen en mayoritariamente de Bahoruco, marca región, por ser el mejor plátano del país, por eso tiene siempre un mejor precio.

Junto a este producto, el plátano Barahonero, peligra por la situación, la uva de Neiba, lugar privilegiado del país en su producción, que de seguir el Yaque del sur por su cuenta, llenando el lago Enriquillo, los productores desplazados tendrán necesariamente que acudir a los terrenos de vocación para la uva, para usarlo en otros renglones o viviendas.