BRAITON FIGUEREO REYES
Desde Espa�a para Ecos Del Sur
Si analizamos bien las letras de algunas canciones de nuestros principales cantantes, nos damos cuenta de que muchas letras hablan de hombres que se enamoran de ni�as de 15 a�os, de hombres que hacen mujer a una ni�a, en fin cosas que no llevan a muchos a pensar, que lo interesante son las menores.
Vivimos en un pa�s en el que el hombre trata a la mujer como un trofeo, en un pa�s extremadamente machista, en el cual el hombre puede hacer lo que quiera, incluso, estar con varias mujeres, teniendo a su vez, hijos con ambas, pero sin embargo si una de esas mujeres se cansa de esa vida de "mierda", el hombre entra en c�lera y en la mayor�a de los casos, acaba con la vida de dicha persona.
El problema de nuestro pa�s es el de endurecer las leyes para que dichos maltratadores y asesinos cumplan m�s o menos a�os, v�ase el ejemplo de Espa�a, que con una ley dur�sima contra los maltratadores y los presuntos maltratadores, siguen matando mujeres todos los dias, el problema nuestro radica en la escasa o nula educaci�n que recibimos sobre temas como la igualdad de derechos entre el hombre y la mujer. Que debemos de dejar de caer en el error de que somos el sexo fuerte y que nuestras mujeres son un simple complemento en nuestras vidas. Debemos respetar las personas que nos dan la vida, a las que paren nuestros hijos.
Debemos darle un toque de atenci�n a todos aquellos cantantes, para que con las letras de sus canciones, no aumenten la creencia de que podemos hacer con las mujeres lo que queramos.
Este problema no debemos de dejarlo de lado, y por el hecho de que las mujeres que salen en las noticias no son de nuestra familia, no debemos olvidar de que en cualquier momento le puede suceder a un ser querido.
Sabemos de sobra que nosotros, los dominicanos, somos unas de las personas mas posesivas que existen, que no nos gusta que nadie mire nuestras mujeres, pero sin embargo podemos mirar las de otros.
Somos de las personas que salimos de fiesta el fin de semana, en la mayor�a de las ocasiones a buscar mujeres, teniendo a la nuestra en casa cuidando de nuestros hijos. Llegamos a las tantas de la madrugada y nuestras mujeres no tienen derecho a reclamarnos nada porque somos los "hombres" y hacemos lo que queremos.
Esta mentalidad hay que cambiarla, porque ese no es el camino...
