Quienes donan algo a una familia, a la patria a su terru�o, no deben imponer ese gesto por encima de la necesidad de modernizar los emblemas de su natal.
Maestro, lo que uno dona, lo ha donado y creo que por desprendimiento y en acopio a las ense�anzas cristiana no debe andarse exponiendo como gloria.
Y debo referir como asqueante el que un barahaonero cuando residi� en Estados Unidos dono un cami�n volteo al Ayuntamiento local y cuando vino a vivir aqu� nuevamente lo reclamo para venderlo,(solo hago la referencia).
Maestro nuestra glorieta, testigo fiel de nuestros d�as de enamorados, de conquistas y hasta de matrimonio, no debe albergar mas sentimientos que nuestro emblem�tico ri� Biran, que en los a�os de gloria fue parte de nuestro desarrollo, inspiraci�n de poetas y cantautores.
Se uso como transporte de traviesa o madera que se cortaban en las lomas cercanas y se lanzaban a sus aguas y eran colectadas en la playa punta Inglesa para ser embarcadas en goletas a islas caribe�as.
Hoy agoniza, languidece, debido a la contaminaci�n y al desmonte que se ha producido en su nacimiento, pero ah� pocos hemos levantado nuestra voz, y mucho menos hemos iniciado acciones para impedir su muerte.
Hoy usted, maestro se une a las voces que son disidentes que est�n en desacuerdo sin esperar los resultados de organismos especializados que determinen su permanencia o no.
Maestro, sab�a usted que a ese patrimonio se le han realizado varias reparaciones sin criterio profesional, aunque en ellos hayan participado profesionales de la construcci�n.
Le contesto a usted porque es usted una voz muy alta, un ilustre barahaonero con moral y prestigio para hablar de nuestras cosas, aunque le refiero hechos donde usted no ha dicho nada.
De repente, se pierde igual que yo y otros compueblanos que nos hemos apresurado a emitir nuestro punto de vista a favor o en contra sin haber escuchado los resultados de peritaje que hacen los especialistas en monumentos.
En honor a nuestro amor por Barahona hemos olvidado que el Cabildo local a trav�s de su sala capitular es quien tendr� la voz cantante, que se tendr� que escuchar a ciudadanos y que estos tendr�n que escuchar a los especialistas y que de ah� saldr� lo que ser� el destino de la glorieta, m�s famosa.
Maestro tenemos muchas agendas en la cual usted debe estar en primera fila, pero debemos afinar posiciones concensuadas para que no haya la disparidad de criterios que existen a favor de la demoliciones de la glorieta o no.
Maestro no tome mis se�alamientos como una cr�tica a su postura, v�alo como la preocupaci�n de un ciudadano que hoy disiente de sus criterios, pero que quiere formar parte junto a usted en las acciones por una mejor Barahona para todos.
Maestro, lo que uno dona, lo ha donado y creo que por desprendimiento y en acopio a las ense�anzas cristiana no debe andarse exponiendo como gloria.
Y debo referir como asqueante el que un barahaonero cuando residi� en Estados Unidos dono un cami�n volteo al Ayuntamiento local y cuando vino a vivir aqu� nuevamente lo reclamo para venderlo,(solo hago la referencia).
Maestro nuestra glorieta, testigo fiel de nuestros d�as de enamorados, de conquistas y hasta de matrimonio, no debe albergar mas sentimientos que nuestro emblem�tico ri� Biran, que en los a�os de gloria fue parte de nuestro desarrollo, inspiraci�n de poetas y cantautores.
Se uso como transporte de traviesa o madera que se cortaban en las lomas cercanas y se lanzaban a sus aguas y eran colectadas en la playa punta Inglesa para ser embarcadas en goletas a islas caribe�as.
Hoy agoniza, languidece, debido a la contaminaci�n y al desmonte que se ha producido en su nacimiento, pero ah� pocos hemos levantado nuestra voz, y mucho menos hemos iniciado acciones para impedir su muerte.
Hoy usted, maestro se une a las voces que son disidentes que est�n en desacuerdo sin esperar los resultados de organismos especializados que determinen su permanencia o no.
Maestro, sab�a usted que a ese patrimonio se le han realizado varias reparaciones sin criterio profesional, aunque en ellos hayan participado profesionales de la construcci�n.
Le contesto a usted porque es usted una voz muy alta, un ilustre barahaonero con moral y prestigio para hablar de nuestras cosas, aunque le refiero hechos donde usted no ha dicho nada.
De repente, se pierde igual que yo y otros compueblanos que nos hemos apresurado a emitir nuestro punto de vista a favor o en contra sin haber escuchado los resultados de peritaje que hacen los especialistas en monumentos.
En honor a nuestro amor por Barahona hemos olvidado que el Cabildo local a trav�s de su sala capitular es quien tendr� la voz cantante, que se tendr� que escuchar a ciudadanos y que estos tendr�n que escuchar a los especialistas y que de ah� saldr� lo que ser� el destino de la glorieta, m�s famosa.
Maestro tenemos muchas agendas en la cual usted debe estar en primera fila, pero debemos afinar posiciones concensuadas para que no haya la disparidad de criterios que existen a favor de la demoliciones de la glorieta o no.
Maestro no tome mis se�alamientos como una cr�tica a su postura, v�alo como la preocupaci�n de un ciudadano que hoy disiente de sus criterios, pero que quiere formar parte junto a usted en las acciones por una mejor Barahona para todos.