A una persecución política, atribuyó el locutor Elphis Pérez, su cancelación de la emisora Palma FM, gestionada por funcionarios del Gobierno y de Empresas Radiofónicas.
Pérez, la voz oficial del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), en esta localidad, dijo que la persecución contra su persona se estaba produciendo desde hace tres años.
“Desde hace tres años éramos víctima de una tenaz persecución política, de parte del sector oficialista dentro de la empresa y fuera de esa empresa”, dijo.
El comunicador manifestó que Empresas Radiofónicas en la actualidad está dominada por algunos personajes, que ni califican para ese puesto, porque no tienen la capacidad, para el mismo.
“Nosotros acusamos al señor Domingo Silfa Vargas, conocido como Tito y al señor Leopoldo Cornielle (Leo, cuya función no es de periodista sino de otras, que buscan hacerle daño a sus compañeros”, reiteró.
Indicó que desde hace varios meses, el estuvo solicitando su cancelación, “la cual no me la daban y parece que estaban esperando que pasara el proceso político para que no tuviera una repercusión a nivel nacional como política, sin embargo eso ayer culminó con mi cancelación, tras un arrecado que tuvo con el señor Leo”.
Acusó al viceministro de turismo y encargado de programación de Empresas Radiofónicas de ir a la Policía, supuestamente en estado de embriaguez, “y valiéndose no se dé que método obtuvo la entrega de 10 Policías bien armados, los cuales fueron al local donde está la empresa para que cuando el llegara lo hicieran preso, sin el cometer delito alguno”.
El locutor Pérez dijo que si él se hubiese presentado a trabajar a su turno de las 6:00 de la tarde, en el edificio “Rodolfo Lama”, hubiese ocurrido una desgracia, pero él fue advertido para que no se prestaran y no fue al lugar.
Indicó que el fue irrespetado por los funcionarios de esa empresa radial, a pesar de que él estuvo laborando por espacio de 13 años, como locutor noticioso.
“La fuerza motora de mi cancelación, es de fuera que viene, es de la cúpula oficialista que viene para que yo saliera de la empresa. Salgo con mi frente en alta, y no me arrepiento, porque fui allí a exigir respecto como hombre que soy”, aclaró.
