Su ex esposa Valeria Liberman toma acciones legales y demanda al cantante por más de 50 mil dólares
Cristian Castro se encuentra nuevamente en problemas legales, ya que su ex esposa, Valeria Liberman, lo demandó por el incumplimiento de la manutención de sus hijas Simone y Mikhail.
Por este motivo la argentina tomó cartas en el asunto y demandó al cantante por más de 50 mil dólares, luego de que el Castro acordó darle mensualmente a Liberman 18 mil dólares.
La suma de la manutención de sus hijos fue acordada cuando en medio de un escándalo firmaron su divorcio en el año 2009, donde por primera vez se enfrentaron legalmente.
La pareja se conoció en el 2000, pero el intérprete terminó casándose con Gaby Bo en el 2004, un año después se divorció de ella para regresar con Valeria y así contraer nupcias con la también abogada.
En 2008 Valeria pidió el divorcio a Cristian acusándolo de agresión física y poniendo en duda su sexualidad.
Su mamá,Veronica Castro, no está en bancarrota
A pesar de los rumores, la estrella mexicana Verónica Castro no atraviesa serios problemas económicos como publicaron diversos medios…
“Gracias a Dios ella está bien… Yo siento que los pasquines tienen que sacar noticias para vender. A lo mejor ellos están en crisis…”, declaró en diálogo con la prensa el productor José Alberto “El Güero” Castro, desmintiendo que su hermana Verónica Castro esté atravesando serios problemas económicos.
“El Güero” comentó que espera que la estrella de las telenovelas regrese pronto porque “si Verónica no está en la pantalla, pierde la audiencia. Yo soy el más interesado en que ella regrese lo más pronto posible a la televisión. Espero que pronto tenga un arreglo con alguna empresa porque siempre es bueno tenerla en la pantalla…".
Si bien en las últimas horas varios medios de comunicación publicaron que Verónica trabajaría en TV Azteca, finalmente esa información fue desmentida. “No puedo decirles donde estoy pero les aseguro que en TV Azteca no será…”, comentó la mamá del intérprete Cristian Castro.
La propuesta de TV Azteca para realizar un programa de entrevistas y variedades nocturno incluía un jugoso contrato, un camarín de lujo, vestuario de primer nivel, guardaespaldas y transporte a su disposición pero evidentemente la propuesta no fue del todo tentadora para “La chaparrita” ya que optó por decir que “No”.
