El país concluye el 2011 registrando el asesinado de 226 mujeres a manos de sus parejas sentimentales, hecho que convierte el feminicidio en un grave flagelo social que cada año deja huérfanos decenas de niños.
Durante ese período, resultaron insuficientes las “tímidas” campañas oficiales contra un problema que mantiene alarmado a los especialistas de la conducta y a la sociedad en general.
La Procuraduría General de la República reportó que entre enero y noviembre, 216 mujeres murieron asesinadas.
El asesinato de cinco mujeres en las últimas 36 horas disparó a 10 el número de feminicidios ocurridos en diciembre, según datos de la Policía.
El número de víctimas se incrementa cada año, lo que evidencia que las autoridades perdieron la batalla contra ese mal, principalmente, por carecer de una política definida para combatirlo.
En el 2010, 210 féminas murieron en forma violenta, 16 menos que en el 2011 y 11 más que en el 2009, cuando fueron asesinadas 119.
La Procuraduría dijo que 173 mujeres fueron ultimadas por sus parejas o ex parejas en el 2007 y 204 en el 2008.
Los reportes de los medios de comunicación indican que muchas de las víctimas han muerto luego de pedir con insistencia ayuda en destacamentos policiales y oficinas de la Fiscalía.
Los estamentos oficiales encargados de encarar el problema, incluyendo el Congreso Nacional, se han limitado a denunciar esa realidad sin emprender acciones concretas partiendo de las razones que la provocan.
La Ley 24-97 sobre Violencia Intrafamiliar, aprobada en 1997, no ha causado los efectos favorables que se esperaban, porque los maltratos físicos y emocionales contra las mujeres se multiplican.
El psiquiatra Cesar Mella, por ejemplo, asegura que el machismo es una de las principales causas de la violencia contra la mujer y consideró que emprender una política de reforzamiento de la personalidad de los hombres dominicanos debe ser la principal preocupación de las autoridades en ese sentido.
Considera que las autoridades deben trabajar el problema de manera transversal, a través de las escuelas y los colegios para ir desmontando la cultura machista.
UN APUNTE
La cultura machista
El psiquiatra César Mella asegura que el machismo es una de las principales causas de la violencia contra la mujer y consideró que emprender una política de reforzamiento de la personalidad de los hombres debe ser la principal preocupación de las autoridades.
Por: Pilar Moreno