El proyecto planea estar listo el año 2050. La cabina podría transportar hasta 30 pasajeros.
Para el año 2050 la empresa japonesa Obayashi espera tener listo el denominado "ascensor espacial", una estructura que se extendería hasta una cuarta parte de la distancia que existe entre la Tierra y la Luna.
Para materializar este proyecto, Obayashi señala que se utilizaría la tecnología de nanotubos de carbono, que es 20 veces más fuerte que el acero. Este "ascensor" se extendería unos 96.000 kilómetros sobre la Tierra, pero aproximadamente a mitad de camino habría una estación espacial, con un laboratorio.
La compañía dijo que podía llevar hasta 30 pasajeros a la vez, que, desplazándose a una velocidad de 200 kilómetros por hora, llegarían en siete días hasta dicha estación. Los turistas podrían parar aquí, pero los investigadores y astronautas serían capaces de llegar hasta el final de la estructura.
Sin embargo, mientras que Obayashi dice que el plan podría funcionar, actualmente no hay estimaciones sobre el costo de la estructura, ni tampoco dónde construirlo, o quién pagaría por ello.
Esta empresa está detrás de la estructura más alta de Japón, la Tokyo Sky Tree, que se eleva por sobre los 630 metros.
Problemas por resolver
Katsuyama también ha reconocido que aun quedan varios problemas por resolver antes que se puedan comenzar las obras, pero confía en que los avances tecnológicos que se están produciendo proporcionen las soluciones necesarias en el corto plazo, de forma que el ascensor pueda estar listo en el año 2050. De concretarse, sería una dura competencia para las empresas que como “Virgin Galactic” están haciendo fuertes inversiones para desarrollar su propia tecnología de cohetes espaciales. De todos modos, el proyecto japones seguramente enfrentará retrasos inevitables, ya que a pesar del optimismo que se puede apreciar en las declaraciones de sus responsables se trata de uno de los más complejos desafíos que alguna vez ha enfrentado la humanidad, y son muchos los obstáculos que seguramente van a aparecer, por que aún tenemos por delante unas cuantas décadas de carrera espacial basada en cohetes.