POR JOSE ANTONIO MATOS
Para Ecos del Sur.
Es la impresi�n que da el informe publicado por el instituto de f�sica de la Facultad de Ciencias de la Universidad Aut�noma de Santo Domingo (UASD), cuando afirma que la gran crecida del Lago Enriquillo, se debe a la gran recarga que han tomado todos los acu�feros del entorno, a partir de el cambio en el r�gimen de lluvias que ha recibido toda la zona Sur y el pa�s a ra�z del paso de las tormentas Odette (2003), Alpha (2005 ), Olga y Noel (2007), Gustav, Ike y Hanna ( 2008 ), Ana (2009 ) y Alex ( 2010 ).
B�sicamente, la gran ofensiva en afluencia de aguas, la produjeron los fen�menos ocurridos a partir del a�o 2005, sin dejar de establecer, que desde la llegada de el poderoso cicl�n George, el 23 de septiembre del 1998, cuando empez� el proceso de rompimiento, erosi�n y desviaci�n del curso de m�s de 60 kil�metros del curso del R�o Yaque del Sur, junto al deterioro del Dique Trujillo, en MENA, y la remoci�n de altas cantidades de sedimentos.
Pasado el cicl�n George, hubo un per�odo de poca importancia en cuanto a precipitaciones en nuestro territorio, por tanto, de decrecimiento en los niveles del Enriquillo, hasta que hace presencia la tormenta Odette, con la que el Arroyo Blanco � R�o Soliette arras� JIMAN�, produciendo una importante sedimentaci�n y abastecimiento de el lago Enriquillo y el lago Azuey.
A partir del paso de Olga, Noel y Gustav, principalmente, la historia del Enriquillo cambi�, para mal, contabiliz�ndose desde esa fecha, aproximadamente, 2007, una crecida de 14 metros vertical, en el lago Enriquillo y m�s de 4 metros vertical el lago Azuay, y que para dar n�meros m�s recientes podemos afirmar que el Enriquillo, en el a�o pasado creci� 155 cent�metros, bajando 3 cent�metros en lo que va de a�o, hasta el 19-2-2012, mientras que el Azuey presenta, 21 cent�metros en el mismo, y una bajada de 4 cent�metros en el �ltimo referido comienzo de a�o.
En todo este comportamiento, espec�ficamente, del lago Enriquillo, hemos demostrado con nuestras medidas y observaciones, un com�n denominador, las llegadas a la zona de la Hoya del lago Enriquillo, de las grandes cantidades de aguas, procedentes de la zona de San Juan de la Maguana, en las que ya, en la actualidad, no solamente influyen las aguas directas del Yaque del Sur, sino que tambi�n, al de las presas Sabaneta y Sabana Yegua, que llenadas a plenitud, env�an a la parte m�s baja de la Isla, sus aguas sobrantes de uso y los desfogues, que juntos los tres caudales, cambian totalmente la din�mica de crecimiento o no del Enriquillo.
Todo el conjunto de afluencias hacia el Enriquillo, tienen su nivel de influencia en su crecida, pero la presencia en el mismo, del 75% de las aguas que hace esos mismos tiempos iban a la Bah�a de Neiba, est�n entrando al referido lago, provocando una elevaci�n de su nivel, en una proporci�n igual o mayor. Agreg�ndole a esto, el factor Laguna del Rinc�n, reservorio gigantesco situado al este del lago Enriquillo, y 15 metros sobre su nivel, que se abastece con las escorrent�as de San Juan, para seguir haciendo su vertido por su aliviadero natural, aun semanas despu�s de disminuir su abastecimiento.
En los 29 kil�metros que tiene de conducto las aguas desde la laguna del Rinc�n, hasta el lago Enriquillo, 25, muestran una formaci�n de C�rcavas grandiosas, que evidencian un nivel alto de sedimentaci�n, arrancadas de esos lugares, y provenientes de los dem�s lugares, aguas arriba.
