Esta anomalía se registra desde hace tiempo y las autoridades del Instituto Nacional de Aguas Potables y Alcantarillados (Inapa), a nivel local no mueven ni un dedo para corregirla.
Mientras el agua se pierde en esta parte de la población, escasea en otros barrios, donde los comunitarios tienen que comprar a camiones cisternas los tanques de 55 galones, a razón de 40 y 45 pesos.
A pesar de que el tubo averiado se encuentra sobre el río Birán, a pocos metros de la cabeza de este, los residentes en el área se refrescan con el agua que sale del tubo, unos y otros se surten del mineral..
El señor Juan Pérez, quien al momento de este periodista tomar fotos de las averías del tubo, tomaba un fresco baño al tiempo que también llenaba de agua un galón plástico.
"Para los que vivimos en esta área las tres avería que presenta el tubo del acueducto por donde se desparrama el agua, es una bendición del cielo, aunque reconocemos que esta escasea en barrios de la parte alta de la población, pero nosotros no podemos hacer nada al respecto", dijo Pérez.
Por Juan Francisco Matos
