Por Faustino Reyes Diaz, NEIBA, Baoruco.- El encargado de mantenimiento de la Cooperativa de Ahorros y Créditos de Neiba (Coopacrene), Carlos Manuel Vásquez Sánchez denunció que fue maltratado, humillado, vejado y detenido injustamente junto a su ayudante, Carlos Julio Pérez Díaz cuando se dirigían a realizar su labor, en esta ciudad.
El propietario de una electrónica y fábrica inversores y su ayudante, hicieron un llamado al Jefe de la Policía Nacional Mayor General José Armando Polanco Gómez, para que ordene una investigación de este caso porque pudieron haber sido muertos simulando intercambio de disparos, como en otros hechos recientes, confundiéndolos con delincuentes.
Pérez Díaz, dijo que junto a su compañero de trabajo entraba al local de Coopacrene, frente a la Iglesia San Bartolomé, en la calle del mismo nombre, cuando siete personas vestidas de paisanos y en vehículos sin identificación, los interceptaron y los encañonaron con pistolas y armas largas y sin identificarse ni mediar palabras los condujeron a la fuerza al cuartel de la policía de aquí.
Informó, que los clientes de la cooperativa al ver el maltrato a que eran objeto salieron del edificio, junto al Gerente Rudescindo Ramírez, que trataba de explicar quienes eran los detenidos, pero que no lo dejaron hablar y lo encañonaron “Les preguntamos qué pasaba y solo nos dijeron que estábamos presos y estando en el cuartel nos ordenaron quitarnos las correas y los cordones de los zapatos”, Dijo Pérez Díaz.
Todo parece indicar que se trataba de una confusión de los agentes porque luego de dos horas despacharon a los dos obreros de Coopacrene, aunque pudieron correr la misma suerte de los que han caído de manos de la uniformada y luego los familiares tienen que conformase con las excusas porque no eran las personas que buscaban.
Los agentes depuestos en el cuartel policial, no pudieron dar una explicación sobre este caso, porque los policías actuantes pertenecían al servicio secreto de la capital y cuando nos le acercamos a alguno de estos, nos respondieron que investigaban unas vacas que le habían robado a un general.
Comentaron que respondían a las órdenes de un Coronel que nunca se le vio llegar mientras permaneció la prensa. Sin embargo, los periodistas interpretaron que los argumentos de los policías eran para desviar la atención del caso que tienen en sus manos.
Los vehículos que en que se trasladaban los agentes que apresaron los dos obreros, fueron vistos cerca de la noche en el cuartel de la uniformada. Se trata de dos camionetas Nissan colores rojo y blanca, respectivamente, placas L166209 y L115770.
