Por Jose Antonio Matos Peña: Este personaje, es el punto de referencia del actual conflicto frente al tribunal electoral Dominicano, en el que el PRD y diferentes personalidades e instituciones del país han coincidido en que no debe actuar en el proceso electoral venidero.
Se han desatado múltiples declaraciones al respecto, se han desatado similares números de pasiones y se han dejado ver intencionalidades, sobretodo, de parte de actores fundamentales del partido en el gobierno, que obligan al partido mayor del país, a rechazar con más ahínco y radicalidad su salida y la de otros funcionarios electorales más, siendo, el PRD y su candidato, conservadores, debido a que la actuación del presidente del alto organismo electoral se ha hecho pasible de inhibición.
Mientras que por Santiago de los Caballeros, se desata otra complicación, debido a la solicitud de inhibición de su presidente Jaime Tomás, por entre otras razones, haberse presentado vestida de morado, a servir de maestra de ceremonia, en el acto de lanzamiento en dicha ciudad, el pasado domingo, la candidatura presidencial de la primera Dama de la República.
Por la ciudad de Santo Domingo se intenta desacreditar declaraciones justas y razonables del Monseñor Agripino Núñez Collado, y se empeora la imagen de imparcialidad que debe exhibir el presidente de la mencionada Junta, con sus declaraciones.
La respuesta dada por el alto funcionario, mueve a preocupación, porque plantea la integración de un equipo técnico colegiado, en el que obviamente el Revolucionario Dominicano sería evidentemente minoría, lo cual sería inaceptable, en toda sociedad democrática y civilizada, existe la cultura de la auto inhibición de los jueces, y Rosario no puede ser la excepción.