El juez de la Junta Central Electoral, Eddy Olivares, afirmó que de no resolverse el conflicto entre el PLD y el PRD a raíz de la renuncia del director del centro de cómputos y posterior nombramiento de Franklin Frías, las elecciones se llevarían a cabo “bajo sospecha”.
“Pienso que no debe producirse unas elecciones bajo sospecha, que sería lo que ocurriría de no resolverse ese impasse. Estaríamos caminando durante ese proceso electoral sobre una cuerda floja en la que cualquiera podría cuestionar los resultados sin importar cuales sean estos” expresó.
El magistrado continuó diciendo: “Todo el mundo sabe que tenemos un sistema de doble vuelta, y para ganar en una primera vuelta, hay que obtener más del 50%, que es un umbral amplio, y que cualquier resultado que afecte a cualquiera de los candidatos en ese sentido, podría convertirse en una situación delicada para nuestra democracia que está en proceso de consolidación”.
Sin embargo Olivares confía en que con la mediación del rector de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM), Agripino Núñez Collado, se llegará a un acuerdo que de solución a este impase.
“Yo confío plenamente en la sabiduría del liderazgo político, en su experiencia, y confío plenamente en la mediación de Agripino Núñez collado” expresó.
Consideró además que un problema no puede estar por encima de los intereses de la nación; “esto debe asumirse con la madurez que requieren las circunstancias para evitar que se ponga en juego la credibilidad de las elecciones del 20 de mayo”. Por lo que sugiere que se espere el resultado de la mediación de monseñor Agripino Núñez.
