Por: Sara Aquino.
San Juan de la Maguana.- A pesar de las decenas de reclusos que se trasladan a diferentes centros carcelarios del país, el de esta ciudad se encuentra repleto de reclusos.
En el interior de las celdas se adhieren de dos y tres presos en los pequeños cuartuchos que estos adquieren mediante la compra a otros que dejan el lugar después de cumplir sus condenas.
Visitar la cárcel de San Juan los domingos es un martirio para los familiares y amigos de los que por una razón u otra ocupan un lugar en aquel infierno. Una gran parte de los internos allí tienen sus pertenencias en el patio del recinto carcelario, ya que no tienen un lugar dentro del mismo por el masivo número de hombres que habitan allí.
En días pasados fueron trasladas las mujeres que estaban en la Fortaleza José María Cabral de esta ciudad. Las féminas que cumplían condena fueron enviadas a la cárcel de Bani.
El espacio donde habitaban las reclusas no ha sido ocupado, por lo que familiares de los reclusos que están allí como sardinas enlatadas, piden se ocupe este lugar para descongestionar un poco el recinto. Hay alrededor de 300 más de lo que caben. En conversación con varios reclusos de la cárcel pública de esta ciudad, se supo que en dicho centro hay en la actualidad más de 300 hombres por encima de los que caben en el recinto.
Explicaron que en las celdas sólo caben en situación normal 200 personas y que en la actualidad hay unos 500 presos. Algunos internos tienen que dormir en los pasillos de la cárcel, mientras que otros lo hacen en el patio sin ninguna protección del sereno o la lluvia.
Arrabalización.
La arrabalización existente en la cárcel pública de esta ciudad mantiene en peligro a los cientos de hombres que allí habitan, así como también a los visitantes que cada domingo y miércoles van al lugar a ver a sus familiares para llevarles algo.
Según se puede observar, en el patio del recinto existen varios pozos de agua limpia de las tuberías, que podría producir focos de contaminación y crianza del mosquito que produce el dengue. Se sabe de varios presos que han estado presentando síntomas febriles y otros que podrían ser dengue.
Además de esta situación, en el patio hay una gran arrabalización, ya que algunos presos han improvisado lugares de residir y colocan allí, latas vacías, cantinas y otros envases que cuando llueve se llenan de agua.
Auque en el mes de noviembre del año pasado a raíz de una trifulca que se armó en el centro fueron trasladado más de 100 presos, hay en los actuales momentos una superpoblación de reclusos.
