Juan TH denuncia que la Barrick Gold invierte en medios y compra a periodistas - Barahoneros

lunes, 30 de agosto de 2010

Juan TH denuncia que la Barrick Gold invierte en medios y compra a periodistas


Funcionario aconseja a Barrick invertir en medios y periodistas para mejorar imagen.

Por: Juan TH

Un Ministro del presente gobierno aconsejó a la Barrick Gold invertir dinero en los medios de comunicación y los periodistas para mejorar su imagen pública.

Las declaraciones se produjeron en el momento en que las críticas al contrato firmado entre la empresa de origen canadiense y el gobierno dominicano se incrementaban poniendo al desnudo la naturaleza vil y fraudulenta de las negociaciones donde el país será el único perjudicado por la contaminación ambiental y los escasos recursos económicos que recibirá a cambio del oro que se encuentra en las entrañas de nuestras montañas.

El que se lleva de consejo muere de viejo, dice un refrán muy popular. Parece que la Barrick Gold ha seguido al pie de la letra el consejo del Ministro. En efecto, de un tiempo a esta parte han disminuido o desaparecido las críticas o ataques a la empresa de extracción de oro más grande del mundo.

De repente, como por arte de magia, la Barrick Gold ha dejado de ser mala. De repente, sin que nos enteráramos, la Barrick ya no daña el medio ambiente o lo hace muy poco, en un abrir y cerrar de ojos la Barrick contribuye al desarrollo nacional. De manera misteriosa el silencio se convierte en cómplice de los daños que sufrirá el país por la contaminación ambiental.

Sólo hay que escuchar determinados programas de radio o ver algunos de televisión donde las críticas –justas y necesarias- no cesaban. Donde antes había denuncias que entendía serias y responsables, ahora hay un silencio sepulcral.

(Alguien me decía en El Salvador, donde estuve la semana pasada, que algunas denuncias y críticas en los medios de comunicación tienen como propósito una excusa para negociaciones o extorsiones económicas de grandes proporciones)
En lo que a mí respecta, mantengo los mismos criterios sobre la Barrick Gold.

Sostengo que el contrato entre esa minera multinacional y el Estado Dominicano es leonino, que debe ser anulado o renegociado de forma tal que evite la contaminación ambiental y aumente significativamente los beneficios de los dominicanos. Al fin y al cabo el oro es nuestro, está en nuestro territorio.

Voy más lejos: Creo que los malos dominicanos que firmaron ese contrato deberían estar en los tribunales, no importa si son del gobierno o de la oposición. No tengo corruptos preferidos.

De igual manera considero que los ecologistas verdaderos, junto a los sectores progresistas del país deben retomar la lucha contra la Barrick Gold y contra los que, “por unos dólares más”, se han vendido sin importarle la salud ni el bienestar de los dominicanos.

El silencio -siempre cómplice y hasta criminal- no puede sustituir las críticas ni las denuncias, ni mucho menos acciones de masas concretas contra la empresa canadiense y el gobierno.

Solo hay que leer el historial de la Barrick Gold para ver las atrocidades ecológicas que ha cometido en otros países donde incluso han tenido que pagar cuantiosas sumas de dinero por los daños causados.

La Barrick está o ha estado en Estados Unidos, Canadá, Argentina, Perú, Chile, Tanzania y República Dominicana, entre otros países. En la mayoría ha desatado polémicas muy serias sobre los daños ambientales que produce por el uso de materiales tóxicos y de otra naturaleza. Esa empresa, que produce más de 8 millones de onzas de oro el año, la mayor del mundo, no se anda con pendejadas. Lo que quiere lo consigue, si no es por las buenas, es por las malas.

Lamento que el consejo del Ministro –que también debería estar dando explicaciones en los tribunales- , sobre invertir dinero entre periodistas y medios de comunicación haya dado tan buenos resultados.

La verdad es que algunos colegas hacen que de vez en cuando me arrepienta de los 30 y tantos años que tengo trabajando periodismo. Ya me lo decía mi santa madre que en paz descanse: “Deja el periodismo y el comunismo y sigue tu ebanistería que te irá mejor en la vida”. ¡Cuánta razón tenía la vieja!