
Falleció en un sanatorio de Chaco, donde estaba internado a raíz de una complicación derivada de la diabetes que padecía. Tenía 44 años y con sus 2,31 metros, fue el basquetbolista más alto de la historia argentina y estuvo a un paso de jugar en la NBA. En su última etapa en el deporte, se dedicó a la lucha.
Se fue un gigante. Jorge González, el jugador más alto en la historia del básquetbol argentino, falleció anoche a los 44 años en la localidad chaqueña de San Martín, tras sufrir una descompensación.
Según se informó, González fue trasladado este viernes de urgencia a una clínica chaqueña, luego de haber manifestado alta presión arterial y serias complicaciones por la diabetes que padecía.
"El Gigante", de 2.31 metros de altura, era movilizado esta noche hacia El Colorado, su ciudad natal formoseña, para ser velado en la Cooperativa de Servicios Públicos.
González sufría gigantodromegalia, una enfermedad que no le permitía parar de crecer. A los 14 años, medía 1.88 y a los 16 ya rondaba los 2.15 metros.
El ex basquetbolista actuó en Gimnasia y Esgrima La Plata, allí logró el ascenso a la Liga Nacional, y fue llamado por León Najnudel para integrar el plantel del seleccionado argentino que participó del Sudamericano de Medellín 1985.
Luego del Mundial de España, González pasó al Sport Club Cañadense, de Santa Fe, y tuvo una seria lesión de ligamentos que lo mantuvo inactivo por nueves meses.
En su vuelta, y por sus buenos rendimientos en el seleccionado, ingresó al draft de la NBA, en los Atlanta Hawks, pero no logró rendir como esperaba.
Tras su paso por el básquetbol estadounidense, y cada vez más afectado por la enfermedad, González fue tentado a participar en los campeonatos de la Federación Mundial de Lucha y lució en distintas ciudades norteamericanas.
"El Gigante" abandonó los combates en 1995 y volvió a El Colorado formoseño, pero se debilitó cada día más y siguió empeorando su estado de salud.
Sus inicio en la lucha
En 1989, Ted Turner le ofreció un trabajo como luchador profesional en la WCW. Después de un año entrenando, González debutó siendo conocido como El Gigante, el 19 de mayo de 1990, siendo un luchador face en el evento PPV WCW Capital Combat. Estando junto a Sting y Lex Luger en un combate contra el campeón Ric Flair, que luchaba junto a Woman.[4] Tras esto, empezó un feudo con The Four Horsemen, enfrentándose a ellos en The Great American Bash junto a Paul Orndoff y Junkyard Dog, con victoria para González y su equipo.
González debutó bajo el nombre de Giant Gonzales en su corta estancia en la WWF como un heel, teniendo como mánager a Harvey Wippleman. González se dejó barba y llevaba un traje de los músculos del cuerpo que le cubría el cuerpo entero. Apareció en la Royal Rumble en enero de 1993, donde atacó a The Undertaker, eliminándole de la lucha por órdenes de su mánager, comenzando un feudo con él.[13] Undertaker le derrotó en WrestleMania IX después de que él y Wippleman usaran cloroformo para dejarlo inconsciente.[14]
Después, lucharía en el torneo de King of the Ring, siendo eliminado en la primera ronda por Tatanka.[15]
Después perdió frente a Undertaker en Summerslam 1993 en una pelea Rest in Peace.[16] Wippleman dejó a González y se volvió face al no tener ninguna rivalidad.
Durante este período, González apareció en un capítulo de una serie de televisión, Baywatch, en donde utilizó su traje característico. Además apareció en el capítulo piloto de Thunder In Paradise, y en un par de episodios de Hercules: The Legendary Journeys.
Sus problemas personales y de salud empezaron a aparecer detrás de las escenas, perdiendo fans mientras tanto. La última pelea televisada de Giant Gonzales fue una Battle Royal por el vacante Campeonato intercontinental de la WWF en septiembre de 1993.
Tras esto, Jorge fue despedido y peleó su última lucha frente a The Great Muta en la New Japan Pro Wrestling, tras la cual se retiró de la lucha libre.
Falleció víctima del gigantismo y la diabetes.
El viernes 24 de septiembre de 2010 falleció Jorge «The Giant» González en San Martín, Argentina víctima del gigantismo y la diabetes, además de otras consecuencias de sus enfermedades como insuficiencia renal y otros diversos problemas de salud persistentes que no podían ser solventados debido a la mala situación financiera por la que el luchador estaba atravesando.