Por: Ana Carina Castillo.Con el lema “Leer abre puertas”, se celebró hasta domingo, la “séptima” Feria Regional del Libro, Barahona 2011”. Convirtiendo, por cinco días, a esa provincia en la capital cultural del país.
En la semana cultural se desarrollaron más de 240 actividades y participaron otras provincias de la región del Sur como Azua, Bahoruco, Elías Piña, Independencia, Pedernales, Peravia, San Cristóbal, San José de Ocoa y San Juan.
Los asistentes disfrutaron de charlas, conversatorios, talleres, confe-rencias, paneles; presentaciones de teatro, danza, grupos artísticos, escritores, libros y documentales.
En cuanto al teatro, fueron exhibidas las piezas teatrales “La chichigua mágica”, “Doña contaminación y Don verde”, la obra “Todo un hombre”, basada en un cuento de Juan Bosch, dirigida por Miguel Montalvo; “Falsa Alarma”, a cargo de Teatro-Sur de Azua, dirigido por Robert Brito y Bayardo Ortiz; y “María Montés, la Reina del Tecnicolor”, teatro de calle que dirige Miguel Montalvo del proyecto Sembrando Teatro.
Las conferencias dictadas fueron: “El derecho constitucional en República Dominicana”, a cargo de Carlos Julio Féliz Vidal; “Perspectiva de la educación superior en el siglo XXI”, coordinada por el Curso-UASD; “Patrimonio natural de la Región”, a cargo de Rafael Matos Féliz; “Preservación del am-biente y los espacios públicos de Barahona”; e “Historia del desarrollo de las artes plásticas en Barahona”, a cargo de Víctor Cuello, entre otros interesantes temas. Además, se presentaron los documentales: “Jimaní: antes y después de la tragedia. (Río Soliette y terremoto Haití)”, “Nuestra provincia, lugar para ecoturismo”, “Barahona y su gente” y “Barahona, un heroico canto a la libertad”.
Cada día se honró a dos escritores oriundos de las provincias a las que se le dedicó un día en la feria. Entre las personalidades distinguidas estaban Emigdio Osvaldo Garrido Puello y Rafael Emigdio Caamaño Castillo; el poeta Apolinar Perdomo y el historiador Rafael Leónidas Pérez y Pérez; el sancristobalense Tulio Manuel Cestero y Héctor Incháustegui Cabral; Héctor J. Díaz y Ruddy Grullón; José A. Robert y Sócrates Nolasco. De acuerdo a Setzer, vicepresidente de la Cámara Nacional de la Industria Editorial Mexicana CANIEM, el libro es mucho más que un artículo comercial, es “un bien cultural que ayuda a liberar nuestras capacidades y nos hace más humanos, ya sea echando a volar la imaginación con una historia fantástica o formando personas con un pensamiento más crítico y analítico”.
Qué bueno que programas culturales como estos se lleven a cabo, visto la necesidad enorme que tiene la educación nacional para implantar a la lectura como una valiosa he-rramienta en la labor de superar el nivel educativo de nuestro país.
Además es una panacea para los tiempos difíciles que estamos viviendo, pues como dijo el escritor Benito Taibo, “un joven que lee, difícilmente será un sicario”. Él considera que la educación requiere de un mayor presupuesto, lo que evitaría que los futuros sicarios llegaran a sus objetivos de deshumanización.
Este presupuesto no sólo debe reforzar a la educación formal, sino a la sentimental, que es la que mueve los hilos más sensibles en los seres humanos. Totalmente de acuerdo.
Recuerda que hoy el universo conspira a tu favor...
