
Por: Benny Rodríguez.
Barahona.- Siete enfermeras canceladas por la administración de la clínica “Santo Tomás” en septiembre del 2009, exigieron el pago sus prestaciones laborales sin más dilaciones ni complicaciones, debido a que es un derecho que tiene todo empleado cuando la empresa pone fin a su contrato de trabajo.
Las enfermeras dijeron que la administración del centro de salud, decidió rebajarle el salario, con un mayor nivel de trabajo y más presión laboral a raíz de un incendio que afectó menos del 5 por ciento de sus instalaciones el dos de septiembre del pasado año, a lo que las norsas no aceptaron las condiciones.
Odalys Samboy, Mirtha De La Rosa Belisario, Gloria Berenice Ferreras Canario, Lucrecia Alcántara, Adalgisa Martínez, María Elena Pérez y Cecilia Jiménez, no aceptaron las condiciones laborales planteadas por los dueños de la clínica y optaron por hacer una dimisión justificada, la cual fue aceptada por la Secretaría de Trabajo, mediante resolución 1085-2009, la cual es firmada por el licenciado Andrés Valentín Herrera, director General de Trabajo.
El abogado de las enfermeras, Licenciado Danneris Arias, dijo que la demanda laboral contra la clínica “Santo Tomás”, incoado por las norsas ha sido reenviado en nueve ocasiones, debido a que los abogados del centro privado de salud, mediante tecnicismos legales han usado una estrategia de alargar el proceso.
Arias, dijo que el centro médico ha usado el dinero con el que iba a pagar a sus defendidas en la remodelación de ese centro, hacerlo más grande, comprar equipos e inmobiliarios, mientras sus abogados consciente de que no tienen otro camino que no sea pagar a las norsas, usan la estrategia de alargar el proceso, esta vez para el 22 de septiembre próximo.