
Por Mayobanex De Jesús Laurens.
BARAHONA.-No quiero hacer una crónica periodística regido a las normas, deseo por el contrario describir de forma suelta todo lo acontecido con el acto de inicio de las Fiestas Patronales de Barahona.
La actividad inició a las 5:30 de la tarde con las notas de nuestro canto patrio. Otilio Agramonte y Bienvenido Matos Pérez sirvieron de maestros de ceremonia al evento montado en el parque central de esta ciudad.
En la mesa principal estuvieron sentados, el gobernador civil, doctor Rafael Mendoza, presidente de las Fiestas Patronales; la diputada, licenciada Noris Medina, el señor Andrés Villabrille, presidente de la Sala Capitular del Ayuntamiento de Barahona, quien además representó al alcalde de Barahona, doctor Noel Octavio Suberví Nín, debido a que se encuentra en Nueva York participando de las fiestas patronales que se están celebrando en esa urbe.
Completaban la mesa de honor, el viceministro de turismo, licenciado José A. Santana; la reina de las fiestas patronales, señorita Franchesca Féliz y la artista barahonera María Heredia, ganadora del pasado concurso de la Cervecería Nacional Dominicana.
El señor Andrés Villabrille, tuvo las palabras de gracias, representando al síndico de Barahona, seguido del doctor Rafael Mendoza, el cual tuvo a cargo las palabras centrales del acto.
La joven, Franchesca Féliz, tuvo las palabras de honor, como reina representativa de todos los barahoneros en la celebración de sus patronales.
María Heredia, Rafael Mendoza y Franchesca Féliz, procedieron a cortar la cinta, con lo cual se dejaban formalmente iniciadas las fiestas patronales de Barahona 2010, dando inicio de inmediato al desfile por las principales calles de la ciudad, acompañados de los estudiantes de las distintas escuelas, así como de delegaciones deportivas, motoristas, folhweleros, así como también los funcionarios gubernamentales y municipales que estuvieron presentes en el acto.
María Heredia y la reina, Franchesca Féliz, abordaron un moderno auto, decorado para la ocasión, manejado por el hijo de Elán Mañón, con el cual se procedió a recorrer las calles 30 de Mayo, subiendo luego por la Duarte hasta llegar a la Avenida Luperón, desde donde siguieron hasta llegar a la calle Uruguay, desplazándose de nuevo hasta la 30 de Mayo, para retornar al parque central de esta ciudad.