De acuerdo con el obispo, el capo boricua no ha sido capturado porque cuenta con la complicidad y la protección de “padrinos” en ambas islas.
SANTO DOMINGO, República Dominicana.- “Si las autoridades del país siguen involucradas con los hechos de narcotráfico, el país habría de convertirse en un paraíso de delincuentes”. Así se expresó el Arzobispo Metropolitano de Santo Domingo, monseñor Nicolás de Jesús López Rodríguez, al referirse a la protección que ha de tener el prófugo narcotraficante José David Figueroa Agosto en República Dominicana y Puerto Rico.
De acuerdo con el obispo, el capo boricua no ha sido capturado porque cuenta con la complicidad y la protección de “padrinos” en ambas islas. Precisó, además, que las personas vinculadas con casos de narcotráfico deben recibir mayor seguridad por parte de las autoridades penales, ya que son los puntos claves para desenredar la red.
Y es que, según López Rodríguez, no hay suficiente seguridad en las cárceles del país, esto evidente con el asesinato el pasado viernes, en la cárcel de La Victoria, de Gabriel Arias Castillo, alias "Álex el Pelotero", recluso vinculado al caso Figueroa Agosto.
“El narcotráfico ha penetrado todos los sectores del país. Es un mal que afecta a República Dominicana. Es un desafío que tiene el país por delante”, dijo. Las declaraciones fueron ofrecidas en la presentación del calendario de actividades de la Iglesia Católica para la Semana Santa y la Pascua Juvenil 2010.
De: Clave digital
