BARAHONA.- A pesar de sus quebrantos de salud, con 38 años de ejercicio en el periodismo, Juan Francisco Matos Espinosa, aún esta presto a continuar ayudando a aquellas personas que no tienen voz para llegar hasta diferentes estamentos los problemas por los cuales atraviesan en su entorno de vida.
La Raya o Sony, como popularmente se conoce en el campo del periodismo y en su barrio Savica, se inició en el periodismo en el 1973, como corresponsal del noticiero “Suroeste Informativo”, de radio Guarocuya.
Cuenta Matos Espinosa, que en ese entonces se utilizaba la corresponsalía barrial, “es decir que los noticieros tenían corresponsales en cada barrio de Barahona, y radio Guarocuya estaba instalada al lado de la estación de combustible de Fallé en la avenida Casandra Damirón”.
Recuerda que “Suroeste Informativo”, era dirigido por Alejandro Santana, donde estaba acompañado por Miguel Pineda López, conjuntamente con el locutor Manuel Jiménez, “conocido entre nosotros como Pollito, quien vivía en mi barrio Savica”.
Explica que después ingresó a Informativo Guarocuya, “pero esa estación ya había sido trasladada a la parte baja de la ciudad, dirigida por el fallecido Rafael Pineda”.
“En el 1974 comienzo a escribir en El Caribe, en HIZ, radio Cristal entre otros medios radiales de la Capital , donde luego ingrese a laboral en Diario Noticias de radio Barahona, siendo Luis López Méndez y Genao Contreras los encargados”, recuerda Matos Espinosa.
Indica que aprendió a escribir a maquina, “en una viejita que era propiedad de Freddy Radhames Cuello (Timo) y una portátil que era de López Méndez”.
Durante mucho tiempo estuvo como el principal redactor de planta de Diario Noticias, bajo la dirección de Cesar Ramírez, Genao Contreras, López Méndez, Leo Corniell, Pepe Cavallo y quien escribe. Sale de Empresas Radiofónicas en agosto del 2008.
Además del Caribe ha colaborado con El Nacional, y hasta hace poco con el periódico regional Armario Libre.
Al preguntarle, ¿porque nunca dirigió a Diario Noticias de radio
Barahona, a pesar de haber tenido tanto tiempo?, dijo que cuando César Ramírez renunció en el 1997, Tito J. Vargas le ofreció la dirección, pero que no la aceptó, y que cuando leo Corniel renunció recibió la misma oferta, pero volvió a rechazarla.
“Nunca acepté dirigir Diario Noticias, porque yo tampoco recibiría instrucciones en mis funciones de una persona que no sabe nada de periodismo”, dijo categóricamente.
Es miembro del Colegio Dominicano de Periodistas (CDP) y el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa (SNTP). Tiene su propio portal, “Noticiero Barahona”.
Sobre la vida de Matos Espinosa se pueden resaltar muchas anécdotas, pero recordamos, en una ocasión cuando se realizó un piquete en el consulado haitiano en esta ciudad, ubicado en la calle María Montez esquina Anacaona, tras la muerte en Haití de Carlos Grullón, donde acudimos allí a entregar un documento de protestas, y el diplomático no quería recibir la carta, entonces Juan Francisco lo medio bien y le lanzo un periodicazo que le dio en la cara, y de ahí se armó el corre-corre y varios periodistas fueron apresados por la Policía , pero puestos en libertad de inmediato. Ah conservo esa foto histórica.
Narración de Juan.
Cuando un funcionario yanquis llamado Rocke Feller, visitó el país (no recuerdo día ni año), desconocidos en horas de la noche destruyeron a pedradas los cristales de la oficina de Codetel, en ese entonces instalada en la calle Uruguay esquina General Cabral.
Al día siguiente en horas de la noche, a eso de las 8 me encontraba en un villar ubicado en la calle Jaime Mota esquina José A. Robert, cuando de repente se presentó una patrulla en un vehículo una patrulla del G-2 del Ejército, comandada por el cabo Otto, cuyos integrantes estaban trajeados de paisanos.
Entraron al villar y no hablaron con nadie. Fueron directamente hacia donde me encontraba sentado y sin mediar palabras me esposaron t me sacaron a empujones.
Cuando llegamos a la Casa de Guardia de la Policía donde no había ningún Policía en ese momentos, me sentaron en un banco y Otto fue el primero en entrarme a trompadas, acción que fue seguida por los otros criminales que lo acompañaban. En medio de la golpiza escuché una voz fuerte y firme. "COÑO, VAN A MATAR A ESE MUCHACHO aquí en la casa de Guardia de la PN. Quítenle la esposa para mandarlo a encerrar". Ese señor que posiblemente me salvó de que los verdugos de G-2 me rompieran costillas, o quizás de la muerte, era el Sargento de Guardia de esa noche. Luego me enteré que le llamaban Horacio. Era sargento. Por este mismo hecho que o cometimos, también fueron a presados los jóvenes identificados como Claribel Espinosa, hijo de un ebanista llamado Erasmo, Kimín, Fermín, entre otros que no recuerdo sus apodos.
Quince días después, el grupo fue enviado al Juzgado de la Instrucción, cuya titular era una jueza de la cual no recuerdo el nombre. Yo fui liberado por insuficiencias de pruebas gracias a diligencias hechas por el señor Neno Coiscou, hijo del difunto Julio Coiscou, señor que cuando ocupó algunos cargos, empleó a Mi Papá, Luis Emilio Matos (Luis la Raya). Neno conocía muy bien la trayectoria seria de mi padre, a quién echó mucho orine encima cuando era niño. Mi padre cargó a todos los hijos de Julio y su esposa, Doña Tatica. Julio murió y lo mismo sucedió a mi padre muchos años después.
Si no hubiera sido por Neno, quien sabe cuantos años de cárcel me iban a echar por un hecho que jamás cometí
Autor: Teuddy A. Sánchez
Tomado de Ecos del Sur