La mancha de petróleo ya llegó a EE.UU; La limpieza es poco efectiva - Barahoneros

viernes, 30 de abril de 2010

La mancha de petróleo ya llegó a EE.UU; La limpieza es poco efectiva


El crudo derramado en el Golfo de México está en la costa de Luisiana. Por lo grave de la situación, Obama movilizó tropas al lugar. El derrame se produjo al explotar días atrás en el Golfo de México una plataforma petrolera.

El desastre ecológico se materializó en Estados Unidos al llegar anoche a la costa de Luisiana la mancha negra de petróleo que avanza desde que días atrás explotara en el Golfo de México una plataforma del grupo británico British Petroleum (BP).

La mancha negra llegó en la noche de ayer a la costa de Luisiana, cerca de la desembocadura del río Mississippi, pese a los esfuerzos para impedirlo de la Guardia Costera y de BP.

El gobernador de Luisiana, Bobby Jindal, declaró el estado de emergencia y el presidente estadounidense, Barack Obama, ofreció "todos los recursos disponibles", incluyendo los militares, para evitar una catástrofe medioambiental.

El derrame fue declarado catástrofe "de importancia nacional", lo cual pone recursos federales al servicio de la emergencia. El anuncio estuvo precedido por el hallazgo de una nueva fuga de petróleo, que vierte al mar "más de 5.000 barriles (800.000 litros) por día", según el gobierno estadounidense.

La secretaria de Seguridad Interior, Janet Napolitano, insistió en que BP, que arrendaba la plataforma de prospecciones que estalló y se hundió la semana pasada, es "responsable" del derrame y le exigió reaccionar rápidamente.

Una flotilla de guardacostas y de BP había logrado cercar con barreras flotantes parte de la napa para prenderle fuego y evitar que alcanzara la costa. Pero incendiar la mancha trae nuevos problemas ambientales, por las enormes nubes de humo negro tóxico que despide y los residuos aceitosos que deja en el mar.

Los otros estados de la región -Florida, Alabama y especialmente Mississippi- temen que la marea negra afecte sus playas y contamine sus zonas pesqueras, cruciales para la economía local.

Una limpieza poco efectiva

La petrolera BP dijo ayer que está aplicando todos los métodos posibles para frenar el derrame de petróleo en el Golfo de México: desde incendios controlados pasando por las barreras de esponjas tradicionales hasta nuevos productos químicos. Pero la historia y la ciencia sugieren que este esfuerzo de limpieza probablemente no terminará en un medio ambiente limpio.

Los científicos señalan que, en un derrame de petróleo en el mar, se recupera entre 10 y 15 por ciento del combustible. El resto que no se logra extraer se evapora, se disuelve y flota en la superficie, o se hunde hasta el fondo y sigue contaminando, agregaron los expertos.