El recluso enterró a la mujer en su celda y construyó un banco de cemento que colocó encima
Un preso holandés mató a su novia peruana en un penal de Lima en agosto pasado durante un día de visita y enterró el cadáver en su propia celda sin que nadie se diera cuenta durante más de tres meses, según ha informado el jefe del Instituto Nacional Penitenciario (INPE), Wilson Hernández.
El holandés Jackson Sanford Staing confesó el domingo el asesinato de Leslie Dayana Paredes Silva, y posteriormente el cadáver fue encontrado y enviado a la morgue de Lima, ha señalado Hernández en declaraciones a Radio Programas del Perú (RPP).
La autoridad penitenciaria ha explicado que el interno discutió con la mujer el día de su visita y la ahorcó. Luego, la enterró en su celda y construyó un banco de cemento que colocó encima. Hernández ha señalado que el personal del INPE revisa sistemáticamente que no haya extraños en las celdas tras las visitas, pero ha admitido que nadie se dio cuenta de que la mujer no había salido de la prisión ese día.
El penal donde ocurrió el hecho, de Lurigancho, es uno de los más poblados de Perú, con más de 8.000 presos, y también el que acoge a los detenidos de mayor peligrosidad.
