Se trata de un neoyorquino de 28 años que perdió la cabeza por la cantidad de correo basura que le llegaba a su casilla. Ahora se encuentra internado en un instituto psiquiátrico. Los médicos aseguran que es el primer caso de esta índole del que tienen noticias.
Esto es insólito. Pero de verdad, eh. Jeremy Klans, es un ciudadano de Nueva York. Tiene 28 años y enloqueció. Sí, hay muchos motivos para enloquecer en la Gran Manzana, pero nadie, ni siquiera los médicos, habían visto un caso como el de Jeremy.
¿Qué le pasó? Perdió la cabeza por la cantidad de Spam (correo-basura) que le llegaba a su correo eléctronico. Sí, el tipo perdió la chaveta por la cantidad de Spam que recibía y, ahora, se encuentra internado en el psiquiátrico Greystone Park Psychiatric Hospital.
Evidentemente, él tampoco estaba muy bien de la azotea. Eso sí, los galenos desconocían que la práctica la distribución de correo no deseado en Internet podría llegar a perjudicar gravemente la salud de una persona sana.
Según el afectado la gran cantidad de spam en su correo y redes sociales, donde solía pasar la mayor parte de su tiempo, le obligaron a emprender la búsqueda de cada uno de los remitentes y, en una semana, pudo averiguar la identidad de 23 ‘spammers’ potenciales que residían en Nueva York.
Entonces, por las tardes y en el más absoluto secreto, iba a las casas de estos ‘cibergresores’ para cortarles los cables de conexión a Internet, con la esperanza de que le dejaran finamente en paz o por lo menos durante un tiempo.
¿Tuvo suerte como justiciero anónimo? Poca. Apenas privó del servicio a 7 personas, ya que fue detenido por la policía. Durante la investigación se llegó a la conclusión que el Jeremy estaba “tocado” y que sufría un trastorno psicológico, por lo que fue remitido al hospital. ¿Tanto le costaría poner “eliminar”? Quizás se ahorraba un disgustito…