Los Atlanta Hawks lucían como cualquier cosa menos una amenaza de postemporada hace dos semanas, llegando a los playoffs sumidos en una racha negativa de seis derrotas. Ahora tienen la posibilidad de tomar una ventaja dominante de 2-0 en su serie al mejor de siete contra el Orlando Magic.
Oh, sí. Vinimos aquí con el objetivo de ganar dos partidos", dijo el centro de los Hawks Jason Collins cuando le preguntaron si ganar sus dos partidos fuera de casa sería un "golpe mortal" para el Magic. "Nos pusimos en posición y ahora esperamos ganar el Juego 2 el martes por la noche".
La fórmula ganadora de los Hawks en el primer juego de la serie fue la ejecución de tiros externos certeros procurando no perder balones y resistiendo las embestidas del Magic.
La defensa de Orlando está diseñada para anular a los tiradores contrarios en el perímetro y forzarlos a jugar en la pintura, adonde tienen que lidiar con Dwight Howard. El Magic no tuvo éxito en ninguno de estos dos aspectos, y ahora dicen que es una necesidad empatar la serie en el Juego 2.
"Estuvimos enfocados en proteger la pintura y ellos no estaban realmente interesados en llegar al aro", dijo el entrenador del Magic, Stan Van Gundy.
Van Gundy comentó que contener los tiros en salto perimetrales y los tiros de media distancia de los Hawks son sus mayores preocupaciones. Dijo que contó solamente ocho bandejas para los Hawks en el Juego 1. En total, Atlanta anotó apenas 36 de sus 103 puntos en la pintura, pero se convirtieron en el primer rival en 16 juegos consecutivos de postemporada en anotar 100 puntos contra el Magic.
"Incluso el 51 por ciento (en tiros de campo de los Hawks) era engañoso, porque entrando en el último (cuarto) tenían una efectividad del 58 por ciento y fue entonces cuando se definió el partido", dijo Van Gundy. "Así que realmente se salieron con la suya con nosotros. Y tenemos que mejorar mucho la defensa, más allá de lo que hagamos a la ofensiva.
"Si vamos a tener que anotar 105 o 106 puntos cada noche para ganar, entonces vamos a estar en problemas".
No es probable que los Hawks mantengan una efectividad del 60 por ciento durante la mayor parte del Juego 2, pero aún así aseguran que no se están apoyando en eso.
Jamal Crawford, quien anotó 23 puntos en el Juego 1, comentó que no fue una anomalía que hayan lanzado tan bien. Dijo que si no lo vuelven a lograr, el Plan B no es complejo.
"Simplemente seguir haciéndolo con cinco hombres", afirmó. "Seguir haciendo la jugada correcta, renunciando a tiros buenos para obtener tiros excelentes. Es por eso que disparamos con un porcentaje tan alto. Los muchachos dejaron pasar algunos tiros buenos, pero a la larga conseguimos algunos tiros grandiosos. Trabajamos bien con el reloj. Vamos a seguir haciendo las cosas que nos salieron bien".
Dicho esto, el entrenador de los Hawks, Larry Drew, señaló que no pueden depender de los tiros en salto ante un conjunto de Orlando que ha tenido dos días para hacer sus ajustes.
"No queremos ser un equipo que sólo se basa en lanzar tiros en salto", dijo Drew. "... Nos gusta abrir el campo de juego. No será una situación de simplemente conformarnos con el perímetro. Tenemos que encontrar el equilibrio de adentro hacia fuera. Por más dominante que Dwight sea adentro, no podemos rehuir a llevar el balón a la canasta. Tenemos que ser el agresor".
Pero la ventaja clara de los Hawks es su tamaño en el perímetro.
Van Gundy habló de las conversaciones que solía tener con el ex jugador de la NBA Bob McAdoo cuando trabajaban juntos en Miami. Comentó que McAdoo le había dicho que jugar contra rivales más pequeños siempre le dio confianza debido a la zona de confort que encontraba al poder disparar sobre ellos.
"No importa qué tan duro jugaran (sus oponentes), él sabía que podía lanzar por arriba y todo lo que tenía que hacer era concentrarse en meter (el balón). No tiene que apresurarse y adaptarse y todo eso", dijo Van Gundy.
Van Gundy explicó que los tiradores de los Hawks tienen duelos similares con Jameer Nelson, base de 6 pies del Magic, marcando a Kirk Hinrich (6-4).
Tanto Joe Johnson (6-7) como Crawford (6-5), de Atlanta, pueden disparar por encima de J.J. Redick (6-4) cuando está en el juego.
Y eso que ni siquiera estamos incluyendo al ala-pivote Al Horford (6-10), quien se impuso con el pick and pop para crear espacio entre él y Brandon Bass (6-8) y marcar tiros en salto de 15 pies.
Es por esto que Howard, quien se convirtió el Jugador Defensivo del Año de la NBA por tercera vez consecutiva el lunes, dijo que los esfuerzos de Orlando se enfocarán en lograr que los Hawks encuentren otra manera de vencerlos.
"No es nuestro objetivo dejar que los hombres que lanzan bien el balón lo estén lanzando", dijo Howard."Queremos hacer que hagan otra cosa. Jamal Crawford, él lanzó muchos tiros en salto, no lo forzamos a llegar al aro para completar. Lo mismo va para Joe Johnson, era un tiro flotante de lejos o un tiro en salto.
"Así que tenemos que hacer que estos hombres hagan cosas diferentes".
