Rafael Luna, presidente de la Fundación de Saneamiento Ambiental de La Puya (Fundemapu) advirtió sobre el incremento del cólera en la zona, debido a que a pesar del brote siguen llegando haitianos procedentes de su nación.
Los casos sospechosos de cólera continúan en aumento. En el barrio La Puya de Arroyo Hondo en Santo Domingo, al menos 35 personas padecen de vómito y diarrea.
Los casos sospechosos de cólera continúan en aumento. Solamente en el barrio La Puya de Arroyo Hondo, al menos 35 personas padecen de vómito y diarrea, mientras que en La Ciénega unas diez personas fueron llevadas a los centros de salud cercanos en la misma situación ayer.
En la Puya murió de un fuerte dolor en al abdomen Josefa Rodríguez, quien atendía a dos de sus siete hijos internados en el hospital Infantil Santo Socorro, en el sector de Cristo Rey, afectados de vómito y diarrea.
Según narró su hija Mikrina Belgence, todavía ayer seguía internada en el Santo Socorro su hermano Mildres Belgence, de cinco años, afectado por cólera.
Mientras decenas de familias, en su mayoría haitianas, viven apiñadas en casuchas en estado deplorable, donde conviven enfermos y sanos, haciendo sus necesidades fisiológicas como pueden, ya que algunas viviendas carecen de sanitarios.
El presidente del Colegio Médico Dominicano (CMD) Senén Caba, encabezó una comitiva de ese gremio que bajó ayer al barrio El Aguacate, de La Puya, donde describió como “tétrica” la situación, debido al estado de insalubridad imperante en esa zona.
En la comisión del CMD, además de Senén Caba, participaron el infectólogo Clemente Terrero y la pediatra Mery Hernández, quienes hicieron un recorrido por todo el sector.
Los promotores de salud comunitaria reportaron por lo menos 35 personas, todas con síntomas sospechosos de cólera, mientras la población estaba alarmada y exigían la presencia de las autoridades municipales y del Gobierno central.
Menos casos. Salud Pública señaló que los informes recibidos hasta la tarde de ayer indican que la tasa de ataque comenzó a disminuir de manera notable. En el hospital Luis Eduardo Aybar disminuyeron los ingresos a 28 pacientes, en el Francisco Moscoso Puello a 7, y en el infantil Santo Socorro a cinco.
El ministro de Salud, Bautista Rojas Gómez adoptó la medida de que las instituciones públicas vinculadas al sector agua trabajen de manera coordinada para garantizar la potabililidad del líquido que se sirve para el uso en los hogares dominicanos.
Insistió en que los residente en zonas vulnerables deben mantener las medidas de higiene y control efectivo del cólera como forma de mantener el bloqueo epidemiológico logrado hasta ahora.